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El Blog expresa el bizarro mundo de la atención al cliente, en este caso, en una librería.
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Todas las situaciones expresadas en el blog son reales. Algunas podrán estar más o menos adornadas con recursos literarios, pero el Capitan Burton certifica que son experiencias propias o de allegados a él.
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Anonimato
El Capitán Sir Richard Francis Burton agradece la discreción en las descripciones precisas de entornos laborales. Amante de los viajes y aventurero de nacimiento, sabe que es preferible un velo ocultando el rostro a un puñal clavado en la espalda. Amigo de las tertulias y de tenderle la mano a los desconocidos recibe con su mejor sonrisa a quienes quieran escucharlo; pero guarda el peor de los rencores a quienes levanten el manto del anonimato.
capitanburton@gmail.com
16 comentarios:
yo recuerdo mis primeras andanzas como empleado de farmacia. el miedo que le tenia a atender a la gente. una vez tuve a una joven y su grupo de amigos esperando por mas de 20 minutos por un medicamente que le recetaron en el hospital y que no existia. la de puteadas que me lleve por eso.
Capitán, dediqué año y medio de mi vida a atender "gente" y te dejo el link acá. No es para cualquiera atender al público. Preferí dedicarme a otra cosa antes de acabar preso y con el culo roto.
Yo recuerdo que en mis últimos tiempos habia puesto una regla en el local. Le comuniqué a mis compañeros de equipo que desde determinado momento no ibamos a tolerar más insolencias. Por lo tanto, cada vez que alguna persona comenzaba a faltarle el respeto a un trabajador de la librería, el cliente DEJABA de tener razón, y entraba yo en escena. El procedimiento consiguiente consistia en recalcarle al cliente su falta de urbanidad, y acto seguido pedirle que se retire del salón esgrimiendo el famoso slogan capitalista: "la casa se reserva el derecho de admisión y permanencia". Hubo veces que se negaron, y en esas ocasiones hacía yo uso del poder de coerción investido por la seguridad del shopping, haciendo que dichas fuerzas de seguridad invitaran amablemente al individuo en cuestión a abandonar el lugar.
Buenos momentos...
Hasta la Victoria... Onetto.
Tras entrar a una libreria, una señora encara a un vendedor y se establece el siguiente dialogo.
S : - Marx ! (no dijo ni buen dia.)
V : - Marx...que? Algun escrito, ensayo...
S : - El que tiene que saber en la libreria sos vos. Si supiera sobre Marx no necesitaria comprar un libro..
V : - Pero..escrito por él, una biografia, Le puedo dar el manifiesto comunista que...
S : - Me voy a la Feria del Libro porque uds no saben nada-
No, Perroxido..no hubo que echarla..se fue solita..
El poder de las computadoras...
Clienta: -Tenés algún libro de la monjita de la tele?
Vendedora: -Creo que de la Hermana Bernarda no me quedó nada, pero me fijo en la computadora a ver si queda en alguna sucursal...
Clienta: Te hago una consultita de paso? Tengo que ir al Registro Civil de la calle Uruguay...
Vendedora: (Me va a preguntar qué colectivo la lleva), pienso.
Clienta: y como te veo con la computadora...tengo que ir a buscar una PARTIDA DE NACIMIENTO...
me la podés encontrar desde acá?
Vendedora: No... (con cara de que cualquier cosa que le explique no me lo va a entender) tenemos las computadoras en red...pero con el stock de los libros...sólo de esta empresa...
Clienta:No hay problema si VOS NO PODÉS...-con tono comprensivo- era para ahorrarme el viaje.
Luego que se retiró del local, me preguntaba si la señora iría preguntando en cada negocio que entrase por la Partida de Nacimiento, o lo hizo sólo en la librería...
Una contentura leer este blog!
Clienta: Hola, estoy buscando un libro que se llama anorexi-o
Yo: ¿Abzurdah?
Clienta: ¡Ese!
Pienso seriamente en abandonar la atención al público y dedicarme a leer mentes.
Saludos!
(diálogo telefónico)
Chica con vos chillona : - Hola, te puedo preguntar por un libro?
Yo: - Sí, decíme
Ella: - "Las puertas de la percepción", de Huxley
Yo:- No, mirá, ese libro está agotado.
Ella: - Ah! Y no lo podés conseguir de otra sucursal.
Yo: - Mmmno. Te cuento, lo que pasa es que ese libro está agotadísimo, de hecho la gente hace años que llama para pedirlo.
Ella (indignada ante lo obvio): Eeeh! Y por qué no lo piden a la editorial si no lo tienen hace años?
Yo: - Eee, porque está agotado EN la editorial.
Ella: - Ah...Y cuándo lo recibís?
Hombre con cara de preocupado: - Hola, mirá, estoy buscando un libro para una chica de 16 años...
Yo: - Ajá. Bueno, de qué estilo estabas buscando? Algún clásico? Algo de literatura más juvenil?
Él (desesperado): - No, necesito algo que con la historia le enseñe a respetar a sus mayores...
Gracias, este blog me hace sentir menos solo en el mundo
BIRU Que bueno encontrar este lugar para decir lo que es trabajar atendiendo al público.Tengo una Inmobiliaria, y la gente y mas que todo los PROPIETARIOS, son terribles, quieren que vos hagas magia , pretenden que cambie el valor de la propiedad porque ellos necesitan comprar tal o cual cosa, y ni decir de los problemas familiares, en especial matrimoniales que se los descargan con uno que no tine nada que ver y lo mas lindo no pagarte un peso por tus servicios(que a su vez uno tiene que contratar un psicologo o ir alguna actividad unicamente para desenchufate de como te ponen la cabeza)Yo antes de esto pensaba en estudiar veterinaria,y lo tendria que haber hecho por lo menos estaria tratanto con animales mas respetuosos, ubicados y cariñosos.
Anónimo, olvidaste el detalle de que son los dueños quienes llevan a atender a los animales.
Respuesta Anonimo: la persona que lleva a un animalito al medico y gasta su dinero, no discute de lo que no sabe y cuando esta en juego la vida de su amigo mas fiel, el dinero y otras cosas superficiales no tienen lugar.Esa es la diferencia importantisima.
Clienta : -Busco la parte de Zen y Eneagrama.
Vendedor : -Si señora, hay algunos libritos ahi abajo..
Clienta : -Como ahi abajo!! Taan escondidos! Ustedes discriminan a la gente que compra este tipo de libros!?
Vendedor :-No, lo que pasa que en esta libreria no se venden tanto..se vende mas literatura..
Clienta :-Mira pibe, si Borges hubiese leido mas literatura Zen...
pero seguro si venia a esta libreria jamas encontraria un libro..
Clienta: ¿Tenés Rayuela de Borges?
(se produce un chispa en mi cerebro de un cortocircuito que no logro identificar)
Vendedor: Ah.. (dudo, ¿buscarle Rayuela o preguntarle si busca algo de Borges, digamos, Ficciones?. Opto por la primera, es más segura)
Clienta: ¡Ah! Era de Cortazar
Vendedor: ajá (cara de "sí, retardada")
Clienta: Debés pensar que soy una tonta.
Vendedor: (risa seca seguida de una mirada de "tonta no, retardada")
--
Cliente: ¿Tenés ese libro de la lágrima en la tapa?
Vendedor: ¿El arte de sufrir inutilmente?
Cliente: ¡Ese!
--
Cliente: ¿Tenés Ensayo sobre la Locura?
Vendedor: ¿Elogio de la Locura? De Erasmo de Rotterdam?
Cliente: No, es brasilero el autor.
Vendedor: ¿Puede ser portugués? Saramago?
Cliente: ¡Ese!
Vendedor: Me suena "Ensayo sobre la ceguera" o "Ensayo sobre la lucidez".
Cliente: No, esos no. De la locura.
Domingo de sol. Grupo de 3 señoras. La que lleva la voz cantante me pregunta qué tenemos de Hobbes, ese que escribe sobre el cuerpo. Me quedo dudando, porque no tenía idea de que el único Hobbes que conozco hubiera escrito sobre el cuerpo. Pienso que debe de ser otro. Ante mi perplejidad, la señora piensa q soy una librera inepta y me deletrea: H-O-B-B-E-S.
A lo que respondo: "El de Leviatan? "
"Sí, ese" Me dice, "pero no quiero Leviatan, ese ya lo tiene"
Reconozco que pertenece a la raza de buscadores de regalos y le digo lo que tenemos. Me vuelve a preguntar: "No tenés el que habla del cuerpo?"
Ahora que lo pienso habrá escuchado hablar de la sociedad como un cuerpo. Sí, debe de haber sido eso. Entonces me pregunta cuál es el último. Insiste con que el del cuerpo es uno nuevo. Guardo silencio, aprendí que a los clientes no les gusta ser humillados, aún cuando parece que lo estuvieran buscando a propósito. Entonces me pregunta de qué año es uno de los libros que le menciono.
Y bueno. Se lo tuve que decir: "Del siglo XVIII, señora".
Ofendida, humillada (no, definitivamente no les gusta) me dice: "Sí nena, ya se q es del siglo XVIII, pero de qué año es el libro". No sé señora, cómo mierda voy a saber el año de edición de cada libro! Eso lo pensé, no se lo dije. En cambio, le alcancé los que teníamos. Ella, frenética buscando la fecha de edición de cada uno, todo para no dejar en evidencia ante sus amigas que no sabía quién era H-O-B-B-E-S. Encuentra uno del 2006, se convence y decide llevarlo. El coro de amigas acuerda. Pero es muy poquito como regalo.
Entonces me pide un diccionario de inglés-español. Le alcanzo uno y me mira con cara de "Nena, sos idiota?" y me dice: "Te dije inglés-español, no español-inglés". Me armo de paciencia y le explico que en general vienen los dos juntos.
Finalmente lograron llegar a una cifra digna para un regalo (no importa el regalo, importa la cifra). Pero resulta que esta cifra es $100.
"Vamos a pagar con tres tarjetas de crédito. Nos podés dividir la cuenta por tres exacto?"
Y no, señora, el posnet no me admite números periódicos. Eso tampoco se lo dije. Una compañera se apiadó de mí y sugirió que, dado que eran tres libros, cada una pagara uno.
Y así lo hicieron.
(mi trbajo es en un negocio de accesorios-ropa-objetos de diseño, que se caracteriza por estar LLENO de cosas, y desde $2 hasta $500)
-las lamparas se venden? (la mayoria de las cosas, son lamparas!)
-las lamparas cuanto valen? (hay desde de papel hasta lamparas d pie)
-(con los restos de un cenicero de ceramica) se me cayó al piso y se rompio, te lo vengo a cambiar.me lo regalaron y me dijeron que cualquier cosa lo cambiara.
-esto es todo lo que tenes??
-no lo tenes pero de otro color y cuadrada, y de un material mas trasparente (mirando una lampara)
la gente esta loca!
Yo trabajaba en una libreria...
"Tenes el ultio de Black Sabato?"
Fue el acabose total.
Ele: je je, muy bueno tu comentario. De todas maneras te comento que Trotta sacó un libro de Hobbes que se llama "Tratado sobre el cuerpo" el año pasado. Era ese seguramente el que quería la señora. ¿Cuál se llevo?
Saludos al capitán, muy bueno blog. Librera y bloggense, seguíré por estos rumbos.
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