Fui feliz.
Todo lo feliz que se puede ser lejos de un mostrador. No. Todo lo feliz que se puede ser lejos de los clientes.
Pero no era algo que pudiera durar.
"En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y Dios vio que estaba bien. El verde de los árboles, la altura de las montañas, el croar de las ranas. Todo era armonía. Y entonces Dios creó el primer mostrador... y una hueste de clientes surgió de las tinieblas. Y Dios calló y el mundo ya nunca fue el mismo".
jueves, 5 de mayo de 2011
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
5 comentarios:
Acabo de ver a una tal Nancy, que después de dos años sin atender freakies, volvió emosionada (?) a su antiguo mostrador, ese que - cuál mitad animal de Quirón- la completó de la cintura para abajo durante 15 años...
Es una señal? TODO VUELVE?
Marcel Schwob escribió: "No te enamores de tu dolor, porque no va a durar". Tampoco hay que enamorarse de las alegrías, porque esas duran menos.
Me complace mucho que usted haya regresado. Creo que no me equivoco si digo que somos muchos los que lo echamos de menos.
Un abrazo, Capitán
G.B.
Barro Miserable, eternamente no podrás ni aun sufrir.
Kavaliunas: me gustó la imagen del mostrador-centauro. Gracias.
Guillermo: gracias por sus palabras. Un abrazo para usted también.
Anónimo Becqueriano: gracias por sus versos.
La felicidad es tan rotativa pero siempre hay que rodar para buscarla.
Publicar un comentario